jueves, 26 de mayo de 2016

Anne-Robert Jacques Turgot

ANNE-ROBERT JACQUES TURGOT

XIR32137
(París, 1727 – 1781) Economista y político francés. Nacido en el seno de una familia de notable experiencia política, abandonó la carrera eclesiástica poco antes de su ordenación. Robert Jacques Turgot fue uno de los gobernantes franceses más representativos de la segunda mitad del siglo XVIII, y el que se consagró más a fondo a una concreta reforma económica y social. Después de haberse afianzado brillantemente en la Sorbona, abandonó en 1751 la carrera eclesiástica, a la cual había estado inclinado, y se orientó hacia la administrativa. Colaboró con un grupo de enciclopedistas, y escribió diversos artículos para la Enciclopedia de Diderot y D’Alembert; se relacionó, además, con los fisiócratas, y singularmente con su jefe, François Quesnay, aunque no compartía por completo el riguroso “esprit de système” de tales economistas. Una gran libertad, en efecto, lo mantuvo apartado de cualquier sistema esquemático abstracto; sus reformas, aun cuando inspiradas en las premisas de la fisiocracia, no quedaron encerradas en tales límites.
Intendente real de Limoges de 1761 a 1774, Turgot adquirió un conocimiento preciso de las exigencias económicas de la región, cuyas condiciones mejoró a través de una serie de audaces y adecuadas medidas, en las cuales quedaron comprendidas la abolición de las “corvées” y la sustitución de las mismas por prestaciones monetarias, que procuró distribuir con la mayor ecuanimidad. Al mismo tiempo favoreció las comunicaciones, la instrucción y el desarrollo agrícola e industrial, y llevó a cabo una intensa labor de socorro con motivo de las graves penurias de 1770 y 1771.
La capacidad con que desempeñó su cargo le valió, en agosto de 1774, el nombramiento de ministro de Hacienda del nuevo monarca, Luis XVI, dignidad que conservó hasta el mes de mayo de 1776. En el curso de estos dos años se entregó resueltamente a la ardua misión de la reorganización administrativa y del fortalecimiento del crédito público; proclamó la libertad de comercio del trigo, uno de los puntos fundamentales del programa de los fisiócratas; suprimió los gremios y luchó con dura intransigencia contra las sinecuras de los nobles y los abusos de la administración.
Todo ello provocó violentas reacciones, tanto por parte del pueblo, que atribuía a la supresión de los impedimentos comerciales una acusada subida de los precios de los productos agrícolas, como del lado de los intereses perjudicados. Sin embargo, el peor enemigo de Turgot resulta ser la mala cosecha de 1774, que eleva los precios durante el invierno de 1774 y la primavera de 1775. En abril se producen disturbios en Dijon, y a principios de mayo tienen lugar las revueltas conocidas como la “Guerra de las harinas”. Turgot demuestra firmeza en la represión de los disturbios, y consigue el apoyo del Rey.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario